Todos los recursos mencionados están listados al final de la publicación.
También disponible en Spotify - YouTube - Apple.
Evita congelar tus alimentos
Aunque quiero terminar viviendo un poco alejado del mundo, no quiero estar tan alejado como para que me tengan que enviarme carne o pescado en casa.
Me refiero a que quiero estar en un sitio donde pueda acceder yo a mí comida de forma local.
Lo ideal sería producirla pero también que pueda ir a recogerla yo personalmente.
Uno de los motivos principales es que el propio procesamiento de la carne ya hace que se lleve daño oxidativo.
Y aquí estoy hablando de simplemente cocinar o congelar.
Un factor que aún multiplicamos más cuando no se sella correctamente durante la congelación o si la congelamos después de que la hayan procesado. Es decir, cuando ya se ha oxidado.
A efectos prácticos esto significa que perdemos vitaminas cuando congelamos, pero también cuando cocinamos.
Obvio.
Porque calentar la carne siempre destruye las vitaminas por oxidación, por ruptura celular o por calor.
Algo que ocurre en distintos procesos dependiendo del grado al que la cocinemos, claro.
Y la prueba de fuego (nunca mejor dicho) de todo lo que digo no sólo son los estudios, sino también el sabor.
Que como ya sabemos, el sabor no dice el estado nutricional del alimento (#14).
Es por esto que el sabor es totalmente distinto cuando tu carne es fresca > cuando está cocinada > cuando está congelada y la descongelas para comértela.
Si congelar o cocinar no supusiera ningún cambio en la estructura molecular, los nutrientes y el sabor una vez descongelada, pues obvio que tendría el mismo sabor idéntico a cuando nos comemos la carne cruda, lo que no es el caso.
¿Y por qué sucede este cambio?
Pues entre otras cosas por la pérdida de vitaminas.
Si cocinas estás perdiendo vitaminas
Las vitaminas no sólo dan cierto color a los alimentos, si no también sabor.
Un sabor que se pierde al procesar (cocinar o congelar, como digo).
Y es que cada micronutriente tiene ciertas “sensibilidades” a estas exposiciones, por ejemplo:
La vitamina A
Una forma de vitamina B6
Y una forma de ácido fólico
Son micronutrientes muy sensibles a los cambios de temperatura, en cambio hay algunas que también lo son, pero no tanto:
D3
E
K2
Esto significa que, si cocina bastante nuestra comida (en el sentido que estamos bastante rato procesando el alimento), es probable que necesitamos consumir un poco más de hígado para obtener, vitamina A, por ejemplo.
Simplemente porque al cocinar, habremos perdido gran parte de estos nutrientes.
Y lo mismo con otras fuentes de grasa como las vitaminas D3, E, K2 y K.
Desde un punto de vista oxidativo, las vitaminas A, D3 y C son extremadamente vulnerables, y esto siempre depende de la frescura de los alimentos y de que se haya envasado correctamente al vacío.
Lo digo porque la mayoría de estas vitaminas son algo sensibles a la humedad.
Y no sólo esto, porque la vitamina A y el ácido fólico son muy sensibles a la luz, y el resto también.
En resumen: si podéis evitar congelar, siempre será mucho mejor.
Pero si hay que hacerlo por lo que sea:
Haberlos envasado al vacío.
Haberlos guardado en un congelador oscuro lo antes posible justo después de procesarlo.
Si vas a calentarlos, priorizar hacerlo lo menos posible.
Si solo te gusta la comida bien hecha, no sé si cocinarlos al vacío a una temperatura más baja conservará algunas vitaminas.
Si sigues una dieta muy cocinada, asegúrate de complementarla con vitaminas A, D y K, o simplemente consumir alimentos de altísima calidad.
Es decir, a menos que intentes seguir una dieta animal basada en alimentos lo más crudos posibles, definitivamente existen preocupaciones en todos los ámbitos, desde la oxidación hasta la exposición a la luz, al aire y al calor.
Así que ya sabéis…
No es suficiente con una buena carne de pasto
Es difícil decir que podemos seguir una dieta basada únicamente en carne y agua cuando la tecnología moderna tiene tantas consecuencias perjudiciales.
¿Tienen nuestros alimentos suficientes nutrientes antes de transportarlos o enviarlos?
Es difícil de decir porque aunque hayamos podido verificar una buena fuente de carne, ¿te has preocupado de la misma forma, de cómo se procesa el conservado de esta carne?
Incluso si estuviéramos en condiciones ideales, no sabemos cómo están los suelos de agotados de nutrientes de los que han consumido los animales, ni cómo están las razas modernas de animales.
La verdad es que no puedo garantizarlo, pero hay un límite a lo que se puede hacer en la sociedad moderna.
Realmente la única forma que he visto de conservar un alimento que además ocurre de forma natural en la naturaleza, es la liofilización.
Hace un tiempo me compré una liofilizadora que cuesta unos 5.000€ y ya hemos estado haciendo algunas pruebas. Algunos experimentos.
Hasta algunos miembros de mi comunidad recibieron hígado liofilizado de altísima calidad, y creo que empezaremos a sacar órganos liofilizados para vender en un futuro porque es la única forma en como yo los conservaría.
Me motivé a comprarla porque vi como los Incas de Perú liofilizaban de forma natural en las montañas.
Esto es algo que quiero ir compartiendo con vosotros a medida que vayamos avanzando en boletines.
Si queréis que os avise sólo hace falta estar pendiente del boletín y espero en unos meses tener buenas noticias para todos vosotros, porque hay muchos pasos burocráticos que estamos haciendo que son una aberración.
Pero enfin…
No te olvides de esto
Como agradecimiento a los suscriptores de esta newsletter, recibirás en cada email que mando un cupón descuento para aplicar a mi tienda de productos para “biopotenciar” tu vida.
Si también te interesa “biopotenciar” tu vida, entonces encantarán los productos de biohacking de mi tienda (como mis gafas anti-luz azul, sal de manantial, sartén de acero inoxidable…).
Como agradecimiento a haber llegado hasta aquí, tienes un cupón de descuento (junto el enlace a la tienda) en la descripción de este boletín.
Cada compra es una manera de apoyar a que siga haciendo este contenido de forma independiente, libre y sin depender de patrocinadores.
Nos vemos en el próximo boletín, del lado biopotencial de Pau Ninja.